Por la provincia de Castellón
Castellón de la Plana
El continuo crecimiento de la ciudad durante el siglo XIX, constituyó su aspecto actual. En 1833 consigue la capitalidad provincial. Hemos visitado, entre otros lugares: Plaza Mayor, ubicada en el centro neurálgico de la ciudad, esta plaza está rodeada por algunos de los edificios más emblemáticos de Castellón como la Concatedral de Santa María la Mayor, el Ayuntamiento, el Mercado Central y la Torre del Fadrí. Palacio Municipal, construido en el siglo XVII en estilo barroco y sede del Ayuntamiento. En el interior se realizan exposiciones temporales, además de permanentes con colecciones de pintura de autores castellonenses. A lo largo de su historia ha sido reconstruido varias veces, pero las últimas reformas se realizaron en la segunda mitad del siglo XX. Concatedral de Santa María la Mayor, enfrente del Ayuntamiento, sus orígenes datan del siglo XII, aunque el actual edificio de estilo gótico valenciano y neogótico, se construyó entre 1939 y 2001, después de ser incendiado en los primeros días de la Guerra Civil y derribado meses después por un acuerdo municipal. En el interior se encuentra una imagen de la Inmaculada del siglo XVIII y varios lienzos. Desde el siglo XII hubo un edificio religioso en este emplazamiento, que fue destruido en numerosas ocasiones por incendios y guerras. El Fadrí, es una torre campanario de 60 metros de altura, situada justo al lado de la Concatedral y declarada Bien de Interés Cultural. Merece la pena subir de forma gratuita por su escalera de caracol de unos 200 escalones que te llevarán por las diferentes salas, terminando en la terraza, desde donde se tienen las mejores vistas del centro de la ciudad. El Fadrí se erigió en estilo gótico valenciano a partir de 1440. Casi se necesitaron dos siglos para terminar la obra. Llotja del Cànem (lonja del Cáñamo) situada a pocos metros de la Plaza Mayor, es un edificio construido en el siglo XVIII en estilo barroco. Catalogado como Bien de Interés Cultural, este edificio de planta cuadrangular se caracteriza por un piso inferior abierto por ambos lados con dos arcos y un piso superior adornado con pinturas alegóricas de Oliet. Es centro cultural y espacio para exposiciones temporales. Plaza de l’Hort dels Corders, es una amplia plaza construida en honor a los castellonenses que trabajaba el cáñamo, está presidida por el Monumento al rey Jaime I y el Monumento al Menaoret, una fuente con una gran torre culminada con unas manos de colores y esculturas haciendo cuerda y extendiendo el cáñamo. Refugio Antiaéreo, está en la Plaza Tetuán. Durante la Guerra Civil (1936-1939) se construyeron más 40 refugios subterráneos para proteger a la población de los ataques aéreos de la aviación italiana y alemana que sufrió la ciudad, aunque la mayoría fueron destruidos con el crecimiento de la ciudad. Este refugio de Plaza Tetuán se recuperó para mostrar como vivían los castellonenses cuando se realizaban estos crueles ataques, a través de paneles informativos.
CULLA
Culla nos traslada a la Edad Media y forma parte de la red de Pueblos Bonitos de España. Hemos podido visitar: La Cárcel de Culla, se encuentra justo enfrente de la Oficina de Turismo, que en su origen fue el antiguo granero del Comendador, reconvertido en prisión durante las Guerras Carlistas. Aún conserva cadenas y grilletes, así como marcas en las paredes que los prisioneros realizaban con lo que podían, que en muchos casos eran su uñas. La Prisión cuenta con varias dependencias, algunas de muy reducido tamaño y escasa ventilación. El Mirador del Terrat, al volver la esquina de la prisión, una bella plaza con bonitos edificios que la circundan. Iglesia Parroquial de El Salvador, a escasos metros del mirador, alberga un retablo del siglo XVI y una bella figura gótica dedicada al patrón de Culla. El Pelleric, es una columna de piedra, donde se retenía a un ladrón a través de una argolla que rodeaba su garganta, esta argolla se unía mediante una cadena a la columna de piedra y de esta forma, el prisionero quedaba expuesto a la burla y humillación de la gente del pueblo. Lo habitual era colocar sobre el condenado, o junto a él, un escrito que indicaba el delito que había cometido. El Carrer del Pla, es la calle más bonita y representativa de la villa. En la Edad media era la vía principal, unía el mercado con el centro del pueblo. Se pueden distinguir ventanales tintados en un azul celeste, que los habitantes creían que este color pintado en sus ventanas ahuyentaba a los malos espíritus y ánimas errantes. El Antiguo Hospital, al que sólo se puede acceder a través de la visita guiada. Actualmente es una sala de exposiciones, con una recreación de una escuela antigua, con los pupitres y materiales de la época. Las Ruinas del Castillo, situadas en la parte más alta de la población. Su origen es de la época musulmana, aunque las murallas de la población son de época cristiana. Las guerras Carlistas, prácticamente destruyeron el pueblo y su castillo. La Porta Nova, es la única puerta de acceso del recinto amurallado que se conserva en la actualidad (de las 3 con las que contaba la villa). Reconstruida en el siglo XIV, se ubica entre la plaza de la Porta Nova y la calle Pellerich, y su anchura es la propia de un camino de herradura.
Morella
De la historia de Morella hay documentación sobre asentamientos humanos y pinturas rupestres de Morella la Vieja declaradas Patrimonio Mundial por la Unesco, incluso hay museo que se puede visitar. Morella ha sido testigo de distintos eventos de importancia en la época musulmana como la batalla del Cid Campeador entre otras. En octubre de 1231 Morella fue conquistada por los cristianos donde se vivieron duras negociaciones entre el noble aragonés Blasco de Alagón y el rey Jaime I sobre la posesión de Morella. Está considerado como uno de los pueblos más bonitos de España, y en la Edad Media era una de las tres ciudades valencianas de mayor relevancia. Hemos podido ver: Muralla y torres, la muralla de Morella tiene un perímetro de 1 kilómetro y medio y bordea toda la ciudad. A lo largo de ella hay 16 torres, perfectamente restauradas, entre las que destacan las Torres de San Miguel que son la entrada principal del pueblo. Las murallas que vemos hoy en día datan del siglo XIV, pero antes que estas ya había existido una muralla árabe. Calle Blasco de Alagón, la calle más pintoresca de Morella y comercial por excelencia. Toda la calle está repleta de soportales, tiendas de artesanía, productos gastronómicos y bares. En las callejuelas paralelas a Blasco de Alagón se encuentra la pequeña judería de Morella. Sus estrechos callejones, típicos de los barrios judíos tienen mucho encanto. Ayuntamiento de Morella, este edificio ha sufrido varias restauraciones, aunque la más importante es la que se llevó a cabo a finales del siglo XX, que mereció el premio Europa Nostra. Este edificio del gótico civil fue construido en el siglo XIV. En él destacan la Lonja y las salas del Consell y de la Corte de Justicia. En estas salas se celebran diversos actos y exposiciones. Antigua prisión de Morella, anexa al ayuntamiento. Desde los años 90 hasta que se convirtió en museo en 2018, la prisión se ha dedicado a oficinas, almacén y archivo. Basílica de Santa María la Mayor, Este edificio gótico fue construido entre los siglos XIII y XV. En él destacan sus dos puertas: la Puerta de los Apóstoles y la Puerta de las Vírgenes. En su interior destaca la Escalera del coro y su impresionante órgano formado por más de 3000 tubos. Convento de San Francisco, muy cerca de la Basílica de Santa María se encuentra el Convento de San Francisco, que es la puerta de entrada al Castillo de Morella. Este antiguo convento data del siglo XIV. En él se pueden visitar los restos de un antiguo claustro y la Sala capiular, en la que se conserva una de las muestras más antiguas del arte macabro español: la Danza de la Muerte. Estos curiosos frescos representan a la nobleza, el clero y el pueblo frente a la muerte. El Castillo, ha sido una de las fortalezas más grandes del Meditarráneo. Fue construido en el siglo III a.C. y por él han pasado una gran cantidad de civilizaciones. Desde 1931 es considerado Monumento Nacional. Por él han pasado importantes personajes como: Abderraman III, el Cid, Jaume I, el rey Fernando de Antequera, el Papa Luna, San Vicente Ferrer… La entrada al Convento de San Francisco incluye también la entrada al castillo. Museo temps de Dinosaures, en él se puede ver una reproducción a escala real de los dinosaurios y conocer la geología y paleontología a lo largo de la historia de Morella. Acueducto, se encuentra fuera del casco antiguo, construido en el siglo XIV. Se pueden observar dos tramos bien diferenciados a través de los cuales se aprecia como se transportaba el agua antiguamente para abastecer a toda la población.
Peñiscola
Por Peñíscola pasaron Íberos, fenicios, griegos, cartagineses, romanos, bizantinos y árabes. Fue musulmana, desde 718 hasta 1233, cuando Jaime I conquistó pacíficamente la ciudad. En 1251, Peñíscola pasa a ser cristiana y entre 1294 y 1307 fue construido el actual castillo templario (llamado del Papa Luna porque de 1411 a 1423 fue refugio del Papa Benedicto XIII). Hemos visitado: Baluarte del Calvario, que vigilaba uno de los flancos de la bahía de Peñíscola de posibles ataques por mar y formaba parte de una gran muralla renacentista del siglo XVI que rodeaba al pueblo y que lo convertían en casi inexpugnable. Ermita de la Virgen de la Ermitana, subiendo en dirección al castillo está la Iglesia de la Virgen de la Ermitana, situada en la Plaza de Armas e integrada a las murallas del Castillo. Construida entre 1708 y 1714, sobre una antigua capilla, se caracteriza por su estilo barroco, su torre campanario de planta cuadrada y tiene en la fachada motivos militares y el escudo de Felipe V. El Castillo, construido en el punto más elevado del peñón que domina la ciudad. Levantado por los Templarios sobre los restos de una antigua alcazaba árabe, entre 1294 y 1307, aunque en 1411 se reformó para convertirlo en sede pontificia de Benedicto XIII, conocido como Papa Luna. Además de ser una fortaleza militar, al ser los templarios monjes, el propio castillo era a la vez un monasterio. No lo pudimos visitar por dentro al estar cerrado por obras. El Papa Luna se instaló en el castillo en el año 1411 y lo convirtió en la sede de su pontificado, hasta su muerte en 1423. Durante el siglo XVI, bajo el reinado de Carlos I y Felipe II, se llevó a cabo una modernización de la fortaleza para adaptarla al nuevo armamento basado en la artillería pesada. Declarado Monumento Histórico Artístico Nacional en 1931. Parque de artillería, se encuentra junto el Baluarte del Calvario, es la única zona verde del casco antiguo. Ubicados debajo del castillo, en estos jardines del siglo XX se encontraban piezas de artillería para frenar los ataques de los piratas berberiscos aunque en la actualidad es un oasis de paz con varios miradores. Faro de Peñíscola, situado junto a la Batería del Terraplén. Esta torre octogonal blanca de 11 metros de altura fue inaugurada en 1899 y emite una señal de luz que alcanza una distancia de 35 millas (65 kilómetros). Actualmente el faro es la sede de la Diputación donde se pueden adquirir las entradas para el castillo y el parque de artillería, además de contar con sus oficinas y una pequeña tienda de recuerdos. Casa de las Conchas, situada a pocos metros del faro, se caracteriza por tener la fachada cubierta totalmente de conchas, que esconden una curiosa historia. Casco Antiguo, está repleto de tiendas de souvenirs. De empinadas callejuelas adoquinadas, fachadas pintadas de blanco y repletas de flores de todos los colores. La pequeña península se Peñíscola está rodeada de una imponente muralla de origen medieval que fue reforzada en el siglo XVI para adaptarla a la guerra moderna basada en la pólvora y el armamento pesado. La muralla tiene tres accesos principales: Portal de Sant Pere, también conocido como Portal de la Luna por el escudo del Papa Luna que corona su arco de entrada. Portal Fosc, que era el principal portal de acceso a la ciudad. Portal de Santa María, es el portal que da acceso a la plaza de Santa María, donde se encuentran numerosas terrazas de bares. El Bufador (el soplador), es un agujero en la roca causado por la erosión de millones de años del golpear de las olas, que conecta una plazuela de Peñíscola, con el mar. La potencia de las olas al estrellarse con las rocas hace que el agua pueda llegar hasta el otro extremo del bufador saliendo disparada como si fuera un pequeño géiser. Cuando el mar no está tan bravo, oiréis el aullido de las olas haciendo silbar el aire dentro de la caverna y proyectándose por el bufador. Museu del Mar, Este museo gratuito ofrece un paseo por la historia marinera del pueblo y su gente. Estatua del Papa Luna, fue instalada en 2007 para rendir homenaje al personaje más popular de Peñíscola: el Papa Luna.
