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Almería, historia y «tapeo»

La ciudad de Almería fue fundada en el año 955 por Abderramán III, convirtiéndose en el principal puerto de Al-Ándalus.

Fue conquistada por los reyes católicos en 1489 y en 1522 un gran terremoto destruyó la mayor parte de la ciudad y el puerto. Almería entró en una profunda crisis que duraría casi tres siglos. Al no tener un puerto, Almería fue excluida del próspero negocio comercial con las Américas.

Finalmente, en la segunda mitad del siglo XX, la ciudad experimentó un gran crecimiento gracias a expansión del cultivo en invernadero y el turismo.

La colina donde se encuentra actualmente la Alcazaba fue el lugar de la primera ocupación de Almería en tiempos prehistóricos, durante un período que podría haber sido la Edad de Bronce. Más tarde, en la época prerromana, encontramos artefactos fenicios y, desde la época romana, hay numerosos restos de cerámica encontrados en las excavaciones realizadas. Los restos de la antigua calzada romana de Bayyana aún se conservan en las afueras de la capital.

Sobre los restos de una fortaleza anterior, el primer califa de Al-Ándalus, Abderramán III, mandó construir la Alcazaba, con sus murallas y con palacios estilo árabe, Se construyó entre 955 y 1014, siendo terminada por Hayrán, rey taifa de Almería. Contaría con un perímetro amurallado de más de 1400 metros.

El tercer nivel fue mandado construir por los Reyes Católicos, con Torre del Homenaje y miradores defensivos. Tiene un estilo más militar y es la zona de más altura de la Alcazaba. Se encuentra un poco separado de las zonas anteriores a través de un foso y contaba con un puente levadizo.

La inmensa muralla de Jayrán, es un complejo defensivo. Fue levantada en el siglo XI y actualmente configura los únicos restos de lo que fue la muralla que rodeó durante décadas la ciudad de Almería. Está formado por siete torreones, tres musulmanes y cuatro cristianos, estos últimos construidos por los templarios de Alfonso VII después de la reconquista cristiana de la ciudad.

La Puerta de Purchena, es el centro neurálgico de la ciudad donde se puede ver la original Casa de Las Mariposas y la emblemática fuente conocida como «El Cañillo». También está la estatua de Nicolás Salmerón, ilustre almeriense que llegó a ser presidente de la I República Española, y renunció al cargo porl negarse a firmar condenas a muerte.

El lugar, antes ocupado por el zoco, es hoy la Plaza Vieja o Plaza de la Constitución. Es un conjunto porticado, configurado en el siglo XIX. En ella se encuentran el Ayuntamiento de Almería (finales del siglo XIX) y el Real Monasterio de la Encarnación. Además en su centro hay una columna corintia de mármol que alcanza los 18,5 metros de altura , que es un homenaje a los liberales que defendieron las reformas frente a Fernando VII.

La catedral, de estilo gótico de transición, es uno de los primeros templos diseñado como un templo-fortaleza. Es una mezcla entre fortaleza militar y templo religioso. Fue construido para defender la ciudad de los ataques piratas por lo que cuenta con almenas y troneras para la defensa. Fue levantada en el siglo XVI con estilo gótico tardío, sobre los restos de una anterior catedral, que a su vez estaba construida sobre los restos de una mezquita. Su planta es rectangular, posee tres naves y tres capillas y está protegida por la Torre del Homenaje del S.XVII. El claustro de la catedral es del Renacimiento y se sitúa en lo que fue el antiguo patio de armas de la fortaleza.

 

El Cable Inglés, también conocido como muelle El Alquife, instalado en la Playa de las Almadrabillas, imponente estructura construida en 1904 con acero escocés, por John Ernest Harrison, un arquitecto perteneciente a la Escuela de Gustave Eiffel y dejó de utilizarse en la década de los 70, servía como medio de transporte, almacenaje y embarque del mineral procedente de las minas de hierro de Alquife, en la provincia de Granada,

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